¿Anzuelos montados?, no gracias.

Los anzuelos montados, como ya sabréis, son aquellos que se sirven como su propio nombre indica, montados o empatillados. Pues bien, este tipo de montajes realizados en la mayoría de las ocasiones a máquina, tienen en mi opinión desventajas en cuanto a fiabilidad y calidad con respecto a los que se realizan de manera manual por uno mismo. Particularmente, muchas son las ventajas que se obtienen con un empatillado casero y os las detallo a continuación.

En primer lugar, con un empatado casero tendremos la posibilidad de elegir el tipo de empatillado que vamos a realizar, el cual es esencial; un empatillado con el cabo mirando hacia abajo, que es el que normalmente viene en los sobres de anzuelos montados, nos servirá para determinados cebos, pero no para los que suelen ser los más utilizados y efectivos, como son las lombrices. Para todo tipo de lombrices (americanas, coreanas, catalanas, titas, albiñocas,… ) utilizaremos un tipo de empatillado específico, con el cabo mirando hacia arriba, que nos ayudará a ensartar el cebo de manera rápida y limpia, dañando a la lombriz lo menos posible y dándonos así una presentación mucho más natural. Este empatillado es eficaz, limpio, fácil de realizar y seguro; por lo tanto es el que particularmente os recomiendo.

Después nos encontramos con la posibilidad de elegir el tipo y el diámetro de hilo que vamos a utilizar. Hoy en día en el mercado existen infinidad de monofilamentos y fluorocarbonos recomendados para confeccionar bajos y dependiendo de las circunstancias del agua y de la especie a capturar utilizaremos unos u otros. No hay que escatimar gastos en cuanto a ellos, siempre mirando nuestra economía escogeremos los que creamos nos darán mejor resultados en cuanto a relación calidad-precio se refiere.

A continuación están los anzuelos, con todas sus formas y variantes, los que elegiremos en función del cebo que utilicemos y a la especie a la que esté destinada. Un anzuelo equivocado puede hacernos perder una gran pieza, y no hablo en cuanto a tamaño del anzuelo, sino a calidad del mismo.

Y por último se encuentra el tamaño de coal, no es lo mismo que yo pueda elegir la longitud de mi gameta, a que ésta me venga impuesta en una medida que suele rondar el metro o metro y medio. Hay circunstancias en las que es necesario utilizar un coal mayor y sólo es posible utilizando anzuelos empatillados por uno mismo.

Deciros que yo era el primero que utilizaba este tipo de montajes con anzuelos montados, ya que son más cómodos y baratos; pero en el mundo de la pesca siempre hay que ir subiendo peldaños, hay que renovarse día a día, hay que innovar y probar nuevos aparejos; todo sea por darse esa pequeña autosatisfacción de saber que has adquirido nuevos conocimientos que te ayudarán a dar de manera más segura y eficiente con esa siempre soñada y anhelada captura.

Saludos y buena pesca.
Alejandro Aguilar